Corazón floral a base de jazmín y azahar con un toque de chantilly. Para finalizar, notas amaderadas de sándalo y del acorde Dreamwood se entremezclan con la vainilla y el praliné creando un magnetismo irresistible. Esta fragancia vegana es obra del perfumista Fabrice Pellegrin. Ambarada y floral, acompaña la fuerza innata y la alegría de una mujer que se sabe el centro de atención por la energía que desprende.
Las imágenes son meramente ilustrativas